La inmigración humana no deja de ser un drama por ello no puede convertirse en un tren a donde todos quieren subirse y demostrar que son poseedores de la verdad absoluta.
La tragedia de la Playa del Tarajal sólo ha servido para que salgan a escena el gobierno, la oposición, las ONG, la fiscalía de Ceuta que ordenará investigar la tragedia y sigan en la sombra las mafias que trafican con los seres humanos.
El director de la Guardia Civil defiende la labor realizada por la Benemérita, que hay quien sólo pretende desprestigiar al Instituto Armado y anuncia querellas contra quien injurie a los agentes.
El Ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz , apoya a la Guardia Civil y señala violencia por parte de los inmigrantes. Y por otro lado admite que se dispararon al agua pelotas de goma, contradiciendo, así, las declaraciones del director de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa,
Declara , además, que los irregulares murieron ahogados en aguas marroquíes y "no tienen signos de violencia" en sus cuerpos. No hubo "devoluciones en caliente".
La vicepresidenta del Gobierno; Soraya Sáez de Santamaría apunta que no sólo analizarán la tragedia sino también las medidas que se puedan adoptar para garantizar la seguridad dentro de nuestras fronteras y adaptar la regulación de las mismas y los procedimientos normativos a los que estamos obligados.
Por su parte cerca de veinte organizaciones denuncian ante la Fiscalía General del Estado la actuación de Guardia Civil en Ceuta. Aluden que según los testimonios de algunos supervivientes no guardan relación con la versión oficial de los hechos.
Entretanto, el secretario de Política Autonómica del PSOE, Antonio Hernando hace ver que la intervención del ministro y de la Guardia Civil estuvo motivada por la raza de los afectados.
Si no fuera por el dramatismo de los hechos, se diría que es el guión de un sainete, al más puro estilo de los hermanos Alvárez Quintero.
Porque después de tantos dimes y diretes. Acusaciones lanzadas entre unos y otros, ninguno ha puesto sobre la mesa una solución factible. Mientras las mafias siguen comerciando con el género humano y los sueños continúan rompiéndose en el espigón de una playa cualquiera.
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