Expresaba un parroquiano asiduo a un programa radiofónico que él poseía un televisor con un automatismo que le permitía desconectarse sólo cuando transcurría un tiempo y nadie le escuchaba
Verdades... mentiras... solidaridad... todo valeObjetivo CLM - Lucía Ballesteros Expresaba un parroquiano asiduo a un programa radiofónico que él poseía un televisor con un automatismo que le permitía desconectarse sólo cuando transcurría un tiempo y nadie le escuchaba. Y en su modernidad y progresía quería disponer de un televisor que cada vez que Rajoy recitara una mentira se interrumpiera la emisión. Ignoro cuántos hogares tendrán el privilegio de gozar de un aparato de esas características pero a mí me gustaría llegar algo más lejos. Quisiera tener una “caja tonta” que cuando un político fuere del color que fuese estuviese engañando a la ciudadanía no sólo se apagara sino que, además, le diese un buen torniscón. Porque todos los políticos deforman la realidad en su propio beneficio. En los días de vino y rosas nadie se inquieta por su vecino pero cuando viene mal dadas están todos fuera de juego y aún se descolocan más porque se han olvidado de los compromisos adquiridos. Por ello la gran mayoría pregona a los cuatro vientos y quienes desean escucharlos que Grecia nunca debió entrar en el Euro. Ahora se han dado cuenta. Pero nadie ha indagado para poner freno cuando Grecia falsificó su déficit público al informar a Bruselas que era del 3,7% cuando en realidad era del 14% del Producto Interior Bruto. Para ello se sirvió de los servicios Goldman Sachs. Aquí cabe destacar que quien acaudillaba dichas operaciones era Mario Draghi, el hoy presidente del Banco Central Europeo. La izquierda inculpa de manera reiterada a los mercados, en general, y a la pérfida banca de inversión, en particular, pero omiten olvidan que su adorada Grecia requirió a los financieros de Wall Street para camuflar sus garrafales cuentas públicas. Fue el Estado Heleno quien provocó su propia quiebra. Las entidades financieras se colmaron de deuda pública .Y cuando fue necesario realizar una quita del cincuenta por ciento sobre los bonos griegos, la banca entró en bancarrota. Después, Europa tuvo que inocular dinero extra para amparar los depósitos de Grecia. O lo que es igual los depositantes griegos fueron salvados con el dinero de los contribuyentes europeos, gracias a la troika, después del descalabro desgobierno de Grecia que se llevó por delante la banca nacional. En la época de bonanza el gobierno planificó una gran estructura de vasallaje a base de enchufes, corrupción y subvenciones. Por ejemplo, el Hospital Evagelismos, uno de los principales de Atenas llegó a tener hasta cuarenta y cinco jardineros, un antiguo ministro de Agricultura inventó una unidad no contabilizada con una plantilla de doscientas setenta personas para digitalizar las fotografías de las tierras públicas griegas, sin experiencia alguna, y en general, afiliados del partido, nunca se llegó a contabilizar con exactitud el número de funcionarios públicos existentes; y sumando todas las extras y complementos, los funcionarios de Grecia llegaron a ganar de media más de setenta mil euros al año frente a los cincuenta y cinco mil euros de Alemania, el presupuesto del metro de Atenas se acerba a quinientos millones de euros al año, en tanto que los ingresos en taquilla apenas llegaban a los noventa millones. Un griego se podía jubilar con sesenta y un años y el noventa y seis por ciento de su sueldo. Tenía más de seiscientas categorías laborales en las que alegando motivos de salud se podía conseguir la jubilación anticipada establecida en 50 años para las mujeres y 55 para los hombres. Grecia , también, está a la cabeza en evasión fiscal. Los sobornos son el pan nuestro de cada día. Al parecer llegan a gastar hasta un total de ochocientos millones de euros al año en mordidas. La deuda pública no es que esté incontrolada es que no hay forma humana de hacerla volver al redil. Syriza y Podemos reclaman ahora una nueva quita soberana, en vez de que Grecia acepte responsabilidad y pague lo que debe. Atenas disfruta de una cartera de activos públicos que se acerca a los trescientos mil millones de euros, pero sin necesidad de llegar a vender todo ese patrimonio podría hacer frente a la deuda con tan sólo reducir a la mitad la carga del Estado, vendieran el cincuenta por ciento de sus activos y aplicara un compromiso serio de equilibrio presupuestario. De lo que se deduce que Grecia puede pagar pero no quiere y todo parece apuntar a que no lo hará. Otros que parecen estar en la cuerda floja son los partidos españoles. Al parecer estos deben doscientos cinco millones de euros y sus donaciones se han visto reducidas hasta el cincuenta por ciento. Las subvenciones públicas de las diferentes administraciones sumaron ciento noventa y seis millones de euros cuando en sólo dos años han gastado doscientos treinta y seis millones de euros. Tres reformas legislativas sobre la Ley de Financiación de Partidos Políticos, la crisis y el descaro corruptivo marcan las pautas para semejante comportamiento entre ingresos y deudas en la vida de los partidos políticos durante estos últimos seis años. En 2007, con la Ley de Financiación de Partidos Políticos aprobada 20 años antes, se podían hacer donativos anónimos siempre que no superasen los 60.000 euros al año y su procedencia no fuera de empresas contratistas de la administración pública. Hecha la Ley hecha la trampa. Los donativos pueden ser de cantidades superiores pero efectuadas en varias partidas. En sólo seis años el Partido Popular ha pasado de ingresar en donaciones cuatrocientos mil euros frente a los casi cinco millones. El Partido Socialista detalló unos ingresos entre dos millones y medio y tres millones, cantidades superiores a las del Partido Socialista. La justificación que dieron fue que sus cargos públicos aportaban un tanto por ciento de su salario para el partido. Por vez primera en 2014 han separado en sus cuentas las partidas procedentes de donativos particulares y el impuesto que pagan sus cargos públicos. En 2011, los partidos políticos declararon al Tribunal de Cuentas unas deudas con los bancos de doscientos setenta millones de euros. Llegados al ejercicio 2013, los partidos reconocían una deuda de 205 millones. El PSOE es el que más deuda acapara con los bancos en los últimos años. Si bien en 2007 su morosidad era similar a la del PP, cincuenta y nueve millones de euros, seis años después el PP informó al Tribunal de Cuentas que sus deudas con los bancos ascendían a los cuarenta millones de euros, mientras que las del PSOE eran de sesenta y cuatro mil quinientos millones. Tal vez deberíamos aprender de la naturaleza y más concretamente de su mundo animal. Se ha demostrado que los gansos cuando vuelan lo hacen en forma de V. ¿Por qué lo hacen, nos preguntaremos?. Lo hacen porque cada pájaro cuando bate sus alas provoca un movimiento en el aire que ayuda al compañero que va detrás; y a la vez genera un setenta por ciento su potencia de vuelo que si volara en solitario. Gracias a esta táctica va engendrando con sus alas una fuerza de sustentación que favorece al ganso que viene detrás. Cuando alguno de ellos abandona la formación siente el peso de la soledad y el sacrificio que supone volar apartado de los demás. En su desánimo, añora a sus compañeros y decide regresar con ellos para poder seguir adelante. Si el ser humano detentara la misma erudición que los gansos seguiríamos unidos a aquellos que vuelan en la misma dirección y nos comprometeríamos dejarnos ayudar y, por ende, a tenderle la mano a nuestro compañero de viaje cuando éste lo necesitase. Los gansos que van a la cola de la formación graznan para insuflar ánimos a los que van a la cabeza para que no desfallezcan en su empresa. Una palabra de aliento y esperanza siempre es necesaria pero, nunca, las palabras deben ser empleadas para destruir, vejar o amedrentar. Cuando un ganso enferma o cae herido por un disparo siempre salen en su auxilio dos de la bandada para ampararlo y abrigarlo hasta su curación o fallecimiento, después regresan con el resto de la bandada. Si el sentido común del hombre se asemejara un poquito al del ganso persistiría en un vínculo con su semejante y trabajaría en equipo. Si permanecemos unos junto a otros, si formamos equipo, si somos capaces de superar nuestras diferencias y arrostrar cualquier situación, si le damos sentido al valor de la amistad, si somos capaces de compartir, entonces la vida será más sencilla y el camino más liviano en su andadura. |
Agregar comentario