Cuando llegan unas elecciones todo son promesas, que se cumplan o no ya van en la ética personal. Buenos gestos y la bajada del pedestal de nuestros políticos es lo que inunda la campaña. Grandes mítines, pequeños gestos ensalzados al Olimpo de los dioses como un gesto de lo más grande
Palos en las ruedasObjetivo CLM - David García Huertas Cuando llegan unas elecciones todo son promesas, que se cumplan o no ya van en la ética personal. Buenos gestos y la bajada del pedestal de nuestros políticos es lo que inunda la campaña. Grandes mítines, pequeños gestos ensalzados al Olimpo de los dioses como un gesto de lo más grande. En fin, no nos podemos sorprender es la tónica de todas las elecciones. El problema es cuando pasan unas elecciones como las últimas, entonces ya no es que bajen del pedestal, sino que algunos políticos se rebajan al fango y a la miseria política. La cuestión es que ya no sirve para nada el rédito de antiguas políticas, la vida va cambiando, la coyuntura socio-política ya no es igual que tiempos atrás y muchos políticos faltos de interés social, no se han percatado de eso y lo han pagado. Quizás no sean ellos mismos los culpables en la totalidad, sino que también hay que culpar a esos asesores que a dedo han ido copando puestos bien remunerados y que su capacidad de crítica interna les impide expresar lo que n realidad sucede. Un buen asesor, debe asesorar, informar, siempre buscando el mejor fin de su asesorado, cuando a lo único que se dedica el asesor es a reflejar lo que le dice o menciona el asesorado, ha perdido todo el sentido. Tras las elecciones muchos han sido los ataques de la derechona a posibles pactos del PSOE y PODEMOS. Algo que se puede comprender ya que en campaña se dijeron cosas que podría dejar claro que no pactarían, pero bueno también está claro que es el juego de campaña. Yo sin ser afín a PODEMOS y ni deberme ideológicamente al PSOE, no lo vería con malos ojos, si el fin es una política diferente a la de estos últimos cuatro años. Política que ha conllevado, el ascenso en el precio de cada crédito universitario, nos han restringidos libertades de expresión, la sanidad se ha ido privatizando poco a poco y sin pausa, si el pacto es para ir aboliendo y eliminando lo que ha supuesto estos cuatro años no me parece mal, puesto que el objetivo superior está por encima de cada partido y cada sigla. Al fin y al cabo en campaña todo ataque político siempre va con el fin de arañar votos. El problema es cuando se mete lo personal en la política, entonces es más difícil discernir entre que es política buena y que es revista del corazón. El caso más patético lo tenemos en Madrid. Teníamos a una alcaldable por el PP, cuyo programa electoral brillaba por su ausencia, pero que se permitió el lujo de organizar ella misma como debería ser los debates en la televisión pública de Madrid. ¿Por qué? La verdad que es algo que en ningún país pasaría, pero como se iban a negar si todos/as o casi de los allí presentes son puesto a dedo por ella o sus cercanos. No frenándose ahí, se permite el lujo de atacar personalmente a su rival directa, una jueza. Sus argumentos los de siempre; que si usted es favorable a ETA, que si su marido y usted tuvieron problemas con los trabajadores… pero lo que son argumentos cero. Al final resulta que encima va a darle la mano y ésta se niega y encima la que no tiene educación es precisamente la que ha sido ataca en lo personal. Claro existe un ejército de contertulios que siguen con los argumentos malintencionados y encima mentira. Que ni su marido ni ella deben nada, que salió el juicio y la sentencia fue favorable (y así fue publicada en RRSS), resulta que la candidata en segundo lugar para la alcaldía de Madrid, fundó un despacho de abogados que fueron asesinados por personas de extrema-derecha, resulta que fue una luchadora por la democracia, pero eso no interesa a esos contertulios que a falta de argumentos escogen los de su “jefa”. Si tanto les interesa la vida privada de los maridos de las candidatas, que observen la distribución de los productos alimenticios como el queso en Madrid, o como los ingresos de cierto marido de una presidenta de comunidad han aumentado más del cien por cien, desde que su mujer llegó hace cuatro años a la presidencia del gobierno. Seamos sensatos, en el año 1978, había un grupo que se oponía a la Constitución y son los que ahora se oponen a reformarla, tengo la sensación que es el sector que impide que España como país democrático vaya evolucionando. Son los que siempre ponen los palos en las ruedas. Lo deprimente no es sólo eso, sino que existe una gran parte de la sociedad que por apariencia, herencia o simplemente por desconocimiento o desinformación no se paran, piensan y razonan la importancia que tiene el depósito del voto. |
Agregar comentario