Tembleque revive su tradición más arraigada con la Romería del Cristo del Valle

Tembleque (Toledo) ha celebrado este fin de semana una nueva edición de su Romería del Santísimo Cristo del Valle, un evento que trasciende lo religioso para convertirse en pilar identitario de La Mancha. Cientos de vecinos y devotos peregrinaron desde el amanecer hasta la ermita del Valle, donde se venera la imagen, en una muestra de fe intergeneracional que contó con la participación de cofradías locales y el liderazgo organizativo de la Hermandad del Cristo del Valle.

Actos centrales y protagonistas

La jornada comenzó con una misa solemne presidida por el párroco Carlos Mansilla Paco, quien destacó la importancia de transmitir la fe popular a nuevas generaciones. Los actos litúrgicos, seguidos por una multitud, se complementaron con la presencia de hermandades que reflejan el tejido devocional del municipio.

Enrique López Gil, presidente de la Hermandad, fue señalado como “alma mater” de la romería por su labor en mantener tradiciones e impulsar mejoras. Bajo su dirección, la celebración ha reforzado su continuidad histórica y atraído a jóvenes, asegurando su relevo.

Significado cultural y social

Vecinos mayores resumieron el sentir colectivo con la frase: “El Cristo del Valle es Tembleque, y Tembleque es el Cristo del Valle”. La romería no solo reafirma la identidad local, sino que actúa como punto de encuentro comunitario, marcando el calendario emocional del pueblo.

El evento, que se repite cada septiembre, simboliza la unión entre historia y futuro, ofreciendo un espacio de esperanza y pertenencia en un mundo “que a menudo olvida lo esencial”, según reflejaron participantes.

Contexto y proyección

La ermita del Valle, enclavada en un paraje donde “el horizonte se funde con la historia”, sigue siendo testimonio vivo de una devoción que se vive “desde lo profundo”. La Hermandad ya prepara la próxima edición, consolidando una tradición que, como muchas en Castilla-La Mancha, mantiene viva la memoria colectiva.