La explosión en la planta biosanitaria de Socuéllamos deja un muerto y dos heridos graves

La delegada de la Junta en Ciudad Real, Blanca Fernández, ha trasladado este martes las condolencias del Gobierno de Castilla-La Mancha a la familia de la trabajadora fallecida en la explosión de una planta de tratamiento de residuos biosanitarios en Socuéllamos, ocurrida este lunes. En rueda de prensa, ha confirmado que la instalación acumulaba "un expediente sancionador por infracción grave" y que "no contaba con los parabienes" de la administración regional, tras inspecciones previas que detectaron irregularidades.

Fernández ha detallado que la empresa solicitó ampliar el volumen de residuos tratados y prorrogar su proyecto de investigación, peticiones que la Junta denegó al considerar cumplido el plazo experimental y pendientes "medidas complementarias" exigidas en las actas de inspección. "Les dijimos que no les autorizábamos", ha subrayado, añadiendo que la actividad debía subsanar deficiencias ya identificadas.

Sobre las causas del siniestro, la delegada ha remitido a la Policía Judicial, encargada de determinar si existió "negligencia" o presencia de "producto no autorizado". Respecto a la licencia de apertura, ha recordado que corresponde al ámbito municipal, desvinculando así responsabilidades directas de la administración regional.

El accidente, que también dejó dos heridos graves, mantiene en shock a la localidad ciudadrealeña. Fernández ha expresado su deseo de "pronta recuperación" para los afectados y ha pedido respeto para las familias, "rotas de dolor" según sus palabras. Las investigaciones técnicas y judiciales continuarán para esclarecer los hechos.