La Policía Nacional ha desarticulado un grupo criminal dedicado a la explotación sexual de mujeres en un club de alterne en Miguelturra, (Ciudad Real), deteniendo a tres varones como principales responsables. La investigación se inició tras la denuncia de una víctima que fue engañada y obligada a ejercer la prostitución en condiciones gravosas y abusivas.
Según ha informado la Policía, las víctimas, 15 mujeres en total, eran forzadas a aceptar clientes y a entregar una parte significativa de sus ganancias a sus explotadores. Entre los detenidos se encuentra un hombre acusado, además, de agresión sexual y violencia de género por mantener relaciones sexuales contra la voluntad de una de las trabajadoras.
Relación virtual engañosa
El inicio de esta operación se remonta a la denuncia de una mujer que fue inducida a viajar a Ciudad Real bajo la promesa de una relación sentimental virtual con uno de los detenidos, quien también le ofreció empleo en un supuesto bar en Miguelturra. Al llegar a la localidad, ella y una amiga fueron llevadas al club de alterne, donde les impusieron ejercer la prostitución. Además, el detenido acudía regularmente para exigir pagos y forzar a la víctima a mantener relaciones sexuales.
En la operación, la Policía Nacional ha identificado a otras 13 mujeres en situación irregular trabajando en el establecimiento, las cuales también eran sometidas a condiciones abusivas. Se ha incautado numerosa documentación, entre ella fotocopias de pasaportes de mujeres extranjeras, pistolas simuladas de gas y 2.500 euros en efectivo. El establecimiento ha sido clausurado de manera cautelar por orden judicial.
Sistema de multas y endeudamiento
Las víctimas sufrían, además, un sistema de multas punitivas que agravaba su situación de explotación. Si alguna de ellas se negaba a prestar servicios sexuales, por enfermedad o cualquier otro motivo, se les imponían sanciones de entre 50 y 100 euros, acumulando una deuda difícil de saldar y manteniéndolas bajo el control de los explotadores. Este tipo de prácticas, comunes en redes de trata de seres humanos, generan vínculos de dependencia económica que impiden la salida de las víctimas, quienes en ocasiones ven retenidos sus pasaportes o sufren amenazas a sus familias en sus países de origen.
Lucha contra la trata
Esta intervención forma parte del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual. Para facilitar la colaboración ciudadana, la Policía ha recordado que dispone de una línea telefónica (900.10.50.90) y un correo electrónico (trata@policia.es) donde las denuncias pueden realizarse de forma anónima y confidencial, sin dejar rastro en las facturas telefónicas.








































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