Los Presupuestos de CLM se convierten en punto y aparte….

La falta de aprobación por parte de Podemos de estas cuentas públicas ha desatado una movilización mediática del PS, sus medios de comunicación subvencionados y organizaciones “satélites”. Presionando a Podemos para que aprueben las cuentas. La base de esta presión es poner de manifiesto todas las medidas que no podrán ser aplicadas por la falta de proyecto presupuestario. El problema de estas campañas es que se termina rozando el ridículo. Y cuando esto sucede se pierde la credibilidad. Cualquier día nos levantaremos oyendo que la no aprobación de presupuestos provoca la eliminación de las cenas o los postres  a los “abuelos”  de las residencias públicas;  por culpa de Podemos. Dada la poca renovación de personas y modos del PS en CLM se reproducen viejos esquemas absurdos, y relacionando todos los males de CLM con la no aprobación de las cuentas.

Se ha achacado este frenazo institucional a las primarias internas que tiene que realizar podemos. Y a la necesidad de José García Molina para diferenciarse del PS ya que su compañero de escaño, David Llorente,  se presenta en candidatura alternativa.

Por la otra parte, Podemos argumenta que el 90 % del presupuesto socialista es mimético a los realizados por MD de Cospedal y por lo tanto no han venido a la política refrendar esas cuentas. Sin duda también habrá pesado que en sanidad y educación la reversión de los recortes están siendo con demasiada parsimonia.    

A mi juicio, el resultado es una mezcla de todo pero principalmente de la concepción que tiene el PS y García Page de su relación con Podemos. Fue sintomática la escena de la noche electoral, en la que sin haber habido pronunciación  expresa de Podemos, García Page salió diciendo que iba ser el próximo presidente de CLM.  Cuando no tenía ni tiene mayoría absoluta. No se como sentó esto en la formación morada pero desde luego es una falta de respeto.

Esta escenificación plantaba la base de las relaciones entre PS y Podemos, y era bastante insana. El esquema era muy sencillo, “como el PP y Cospedal son muy malos no tenéis más remedio que apoyarme”. Esto suponía un chantaje soterrado.

Durante toda la democracia el PS en CLM ha desarrollado esta estrategia cuando ha necesitado de IU en los ayuntamientos y diputaciones. Y lo han reproducido en este caso en las cortes regionales. Si esto se lleva al extremo se termina actuando como si los dos diputados de Podemos fueran parte del grupo socialista, y no es así.

Supongo que en el PS de CLM nadie pensaba que Podemos fuera capaz de negarles el apoyo.  Pues sí en este caso Podemos ha sido capaz.

Como ni García Page ni García Molina son unos “patanes” los dos saben que antes o después tendrán que entenderse. Y hacer lo que no hayan hecho hasta ahora. Dejando atrás las notas públicas de desacuerdo y sentándose acordar. Porque a ninguno de los dos les conviene que los presupuestos salgan con el apoyo del PP.

Al PS no le conviene la foto del acuerdo con el PP, porque daría gasolina a los “Sanchistas” regionales, y ratificaría lo que muchos anuncian ya que CLM no apoya a Susana Díaz. Y a Podemos tampoco le conviene porque perdería su poder de influencia regional. Podemos tiene ahora mismo el mayor poder regional que haya tenido la Izquierda alternativa en toda su historia. Lo que no cabe duda es que estos presupuestos suponen un punto y aparte…que esperemos no sea un punto y final de un proyecto que se esperaba ilusionante para echar del gobierno regional al partido más corrupto de Europa.