El castillo cristiano de Guadalerzas lo situamos en el valle del Guadalerzas a dieciocho kilómetros de Los Yébenes y al naciente de la provincia de Toledo.
Se suceden dos fortalezas una árabe y otra cristiana en la senda de Guadalezas clave en el camino a la Córdoba musulmana y si bien mantuvieron el mismo cometido su finalidad fue de signo contrario.
Con la dominación del paso y sus defensas por parte de Alfonso VI, la Orden de Calatrava alza un nuevo castillo con el propósito de ser usado como hospital. En 1178 el baluarte está finalizado y el viejo castillo musulmán es abandonado.
Al asentarse la frontera en Sierra Morena, el castillo empieza a ser explotado económicamente por la Orden de Calatrava. Llegó a ser habitado por la Orden de Calatrava, la Orden del Temple y la Orden de San Juan
Su disposición es muy curiosa al tener una gran torre del Homenaje como cuerpo central, planificada como hospital para los caballeros de Santiago y el Temple; dando , así, una nueva perspectiva de estas construcciones que siempre habían sido de carácter defensivo.
La fortificación es de planta cuadrada, con torres en las esquinas, de escaso tamaño en relación con la Torre del Homenaje. En 1572 Felipe II lo vende al Cardenal Silíceo por lo que en la entrada podemos observar el escudo de dicho Cardenal. Los enormes ventanales pertenecen al siglo XVI cuando se convirtió el castillo en Colegio de Doncellas Nobles de Toledo.
La desamortización del siglo XIX permite que sea adquirido por un particular que lo convierte en vivienda y casa de labor.
De los dos castillos, el cristiano es el más moderno y mejor conservado. Tiene una gran torre del Homenaje de forma rectangular, bordeada de murallas con torres cilíndricas en sus ángulos. A la entrada hallamos la iglesia de estilo barroco.
Ya en 1178 se lo menciona como Hospital de Guadalferga.
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