Hace unas semanas hablábamos del “deporte en estado puro”, aquel con el que nos deleitan los más pequeños en las escuelas deportivas, y fijaos, no ha pasado mucho tiempo, y de nuevo hemos vuelto a ver soñar a niños, en esta ocasión, subidos en motos (Minimoto, MiniGP110 y MiniGP140) durante la disputa de la 13ª prueba del Campeonato “Cuna de Campeones” que este fin de semana se ha disputado en Corral de Calatrava en su flamante nuevo circuito.
Llama muchísimo la atención cuando llegas a un evento de este tipo, la gran infraestructura que se necesita para llevar este tipo de campeonato y poder acabar “quemando ruedas”. Todo muy profesional al más puro estilo de Moto GP. Chavales con edades entre los 6 y los 13 años compiten a mas de 100 kilómetros por hora por intentar conseguir un sueño, llegar algún día a ser profesionales.
Ese es el caso de Marcos Ruda. Hijo de padres ciudadrealeños aunque por el momento reside en Valencia. La historia de este chico es muy peculiar. Estando en Mallorca dando una vuelta con sus padres por la escuela del padre del súper campeón Jorge Lorenzo, Marcos con tan solo tres años de edad, se subió en una Mini Moto. Allí le vieron cualidades y propusieron a sus padres que podrían intentar hacer que el chaval entrenara para ver qué pasaba.
Ante esta difícil situación, sobre todo cuando no eres un apasionado a las motos y tu hijo ni siquiera va a la escuela y no sabe montar en bicicleta, un padre que debe hacer, decisión complicada. Pues Ángel, padre del muchacho, decidió dar rienda suelta al instinto innato de su hijo para conducir motos. Los dos primeros años fueron muy duros, entrenamientos de lunes a sábado con muchísimas horas diarias subido en la moto. Muchos sustos y caídas que poco a poco iban dando su fruto y empezaban a merecer la pena.
Una vez comenzada la escuela, con 6 años, Marcos empieza a competir. Consigue vencer en Baleares, se proclama campeón de España de Minimoto compitiendo incluso en el Campeonato de Europa. Quedándole un año en la categoría lo suben a Mini GP 110, con niños de 10 y 11 años, cuatro años mayores que él y durante todo este año se mantiene en cabeza de la tabla. Tras la carrera de este domingo, se ha asegurado la 2ª posición en la Cuna de Campeones y ya se especula con subirle a Mini GP140.
Después de cada carrera, como las de Corral de este fin de semana, Marcos, que ha estado luchando “a muerte” con todos sus rivales en los entrenos y en las carreras puntuables, se baja de su moto, y como un niño de su edad se acerca a sus compañeros y deciden irse a dar una vuelta con las bicicletas o a echar un partido de fútbol… Sorprende verdad¿ Pues no debería. En el fondo son niños, niños con sueños, niños con un talento especial que necesitan el apoyo incondicional de sus padres para seguir soñando cada semana. Por desgracia muchos de estos niños tendrán que despertarse… Los que no se despierten, pronto seguirán los pasos de otros que ya pasaron por aquí como Julio Simón o Héctor Barberá…
Alguien me dijo cuando era pequeño que “la ilusión y la alegría de un niño nunca se le debe quitar bajo ningún concepto”, solo espero que les permitamos seguir soñando… Recordad que en esta vida, en algún momento “todos acabamos arrastrando…”. He dicho.
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