La normalidad volvió este año a la celebración del Cristo del Amor, organizada por la Hermandad de la Vera Cruz y Virgen de la Esperanza. Contó nuevamente con salida procesional, misa y ofrenda a cargo de los fieles. A lo largo de tres días se han celebrado los cultos al Cristo. Comenzaron el viernes con la apertura de su capilla y rezo del rosario, para continuar en la noche del sábado con la salida del desfile procesional, después de dos años sin poder hacerlo en esta fecha de agosto.
Comenzaba a anochecer cuando la cruz parroquial iniciaba el recorrido desde la puerta de la capilla, seguida por el estandarte del Cristo y la Agrupación Musical de San Sebastián, que ofreció diversas marchas a lo largo de todo el itinerario. También figuraron en el cortejo procesional los representantes de las diferentes cofradías y hermandades de la localidad, que precedían a la carroza del Cristo del Amor, adornada con numerosas flores y acompañada por devotos y directivos. Detrás del paso presidía el párroco de Santa Catalina, Benjamín Rey, acompañado por la presidenta de la hermandad, Mari Cruz Jiménez, el alcalde, Eulalio Díaz Cano, y una concejala del grupo socialista.
Terminado el recorrido, la imagen fue colocada en la puerta de la capilla y, como viene siendo habitual desde hace unos años, la Agrupación Musical de San Sebastián interpretó la marcha “El Cristo de los faroles”, con diversos ‘solos’ de trompeta, que fueron escuchados en silencio por los asistentes y premiados con un fuerte aplauso. Posteriormente, la hermandad invitaba al tradicional zurra y aperitivos, que sirve para la confraternización entre los presentes.
En la mañana del domingo, el Cristo fue colocado nuevamente en la carroza procesional en la puerta de la capilla, en la calle Antonio Maura, siendo ocupadas las numerosas sillas colocadas por los fieles que asistieron a la celebración de la misa, oficiada por el párroco de Santa Catalina, Benjamín Rey, quien en su homilía se centró en el texto del Evangelio de este domingo, centrándose en los términos relacionados con la soberbia habitual en muchas ocasiones en las personas.
La parte musical corrió a cargo de la Asociación Cultural “Amigos del Arte” del Centro de Mayores, que dirigidos por Antonio Serrano Montoya participaron en distintas partes de la misa. Intervinieron asimismo varios directivos de la hermandad organizadora. El alcalde, Eulalio Díaz Cano, y concejales del grupo socialista, también estuvieron presentes en la celebración de la misa.
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