Vinícola de Castilla, una de las principales bodegas de la región, se ha sumado a las alegaciones presentadas por Yuntero en Manzanares, manifestando su firme oposición al proyecto minero de Quantum Minería en la provincia. Esta postura también ha sido respaldada recientemente por Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha, que agrupa a 456 entidades y representa a más de 160.000 socios, quienes han expresado su rechazo al proyecto Neodimio debido a su impacto potencial en el sector productor.
La Plataforma Sí a la Tierra Viva, integrada por diversas entidades sociales, sindicales, políticas y profesionales, ha agradecido la sensibilidad y el compromiso social del sector vitivinícola en la lucha contra la minería de tierras raras. La plataforma subraya que este proyecto no supone una verdadera diversificación económica, sino más bien una amenaza para un sector ya consolidado y de gran relevancia para la economía regional. Entre los productos más destacados de Castilla-La Mancha se encuentran el vino, el aceite de oliva, los cereales, la producción hortofrutícola y los productos ganaderos, todos ellos de gran calidad y con una importante proyección tanto a nivel nacional como internacional.
En línea con las preocupaciones expresadas por Cooperativas Agro-alimentarias, la plataforma advierte de los posibles efectos negativos del proyecto sobre la salud pública, las comunidades locales, el futuro de la actividad agraria y los recursos hídricos. De hecho, diversas entidades como la Fundación Fire y la Fundación Savia también han alertado sobre los posibles perjuicios medioambientales de este plan extractivo, destacando que este no compensa en términos ambientales ni sociales. Las fundaciones señalan que el elevado consumo de agua que podría generar el proyecto es incompatible con la situación de sequía actual, que ya afecta tanto al consumo humano como al sector agrícola.
Asimismo, los expertos alertan sobre el impacto negativo de la fase de refinado de la actividad minera, considerándola una de las más contaminantes y un peligro para las masas de agua superficiales y subterráneas.
El suelo es un organismo vivo, no una cobertura extraíble de "quita y pon"
Como subraya la plataforma Sí a la Tierra Viva, la minería de tierras raras puede causar erosión de la cobertura edafológica, pérdida de biodiversidad y, en última instancia, desertificación, lo que afectaría gravemente a la productividad agrícola y a la seguridad alimentaria. La destrucción de la vegetación y la compactación del terreno reducirían la capacidad del suelo para retener agua y nutrientes, impactando negativamente en el crecimiento de las plantas y la producción agroalimentaria.
En este contexto, la plataforma califica de irresponsables las declaraciones de quienes defienden el proyecto sin tener en cuenta los riesgos medioambientales. La reciente denuncia de la Guardia Civil contra Quantum Minería por realizar actividades de exploración minera sin licencia en Torrenueva añade una capa más de preocupación, ya que la empresa ha ignorado normativas básicas y autorizaciones, lo que refuerza las alertas sobre los posibles perjuicios de esta actividad extractiva.
La oposición al proyecto de minería en Ciudad Real continúa sumando apoyo tanto de entidades productivas como sociales, que alertan sobre los riesgos que conlleva para el medioambiente, la salud y la agricultura de la región.
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