El mercado de turismos está atravesando una de las peores crisis que se le recuerdan. Los datos facilitados por las patronales FACONAUTO (concesionarios), GANVAM (distribuidores oficiales e independientes) y ANFAC (representante de fabricantes de automóviles) confirman los peores presagios: el sector del automóvil no registraba un volumen de ventas tan bajo desde la recesión económica global de 2008.
En lo que se refiere al mercado de turismos y todoterrenos en todo el territorio nacional, la tendencia ha sido negativa a lo largo de estos ocho meses, ya que son 533.042 los vehículos matriculados, es decir, un 10% menos que en el mismo periodo del año pasado. Con todo, se ha registrado un pequeño repunte de ventas (del 9.1%) durante el último mes de agosto que, sin embargo, no introducirá un cambio de dinámica. Buena prueba de ello es que todos los grandes mercados europeos han experimentado un aumento de las ventas durante dicho mes, pero sus respectivos resultados acumulados continúan cayendo.
Esa tónica general se manifiesta particularmente en Castilla-La Mancha con una caída del 20,3% de las ventas en lo que llevamos de año con respecto al mismo periodo en 2021, unos datos que efectivamente dan cuenta de las grandes dificultades que está soportando el mercado de turismos y todoterrenos en la comunidad.
Por provincias, desde enero a agosto, Albacete registra un resultado de -36,12%; Ciudad Real, un -12,76%; Cuenca, un -1,97%; Guadalajara, un -7,10% y Toledo un -19,50%.
En la misma línea, hay que recordar que la región manchega también ha experimentado ese cierto repunte en agosto: una subida del 6,6%, llegando a las 1.540 unidades matriculadas. No obstante, poco esperanzador es este dato si lo ponemos en comparación con las cifras de ventas de agosto de 2019, ya que entonces no solo se vendieron 3.146 unidades, es decir, más del doble de las que se han vendido en agosto de 2022, sino que esa misma cifra ya evidenciaba un desplome de las ventas del 14% en dicho mes con respecto al año anterior, 2018.
Tanto a nivel regional como nacional, la automoción está encontrando serios problemas para poder estimular un mercado que se encuentra deprimido fundamentalmente a causa de la crisis económica, con origen en la guerra de Ucrania, que estamos viviendo actualmente. El alza de los precios, con una inflación de más del 10%, junto con la escasez de microchips, son los principales responsables de la complicada situación que el sector está atravesando.
En palabras de Raúl Morales, director de comunicación de FACONAUTO, “la crisis que está viviendo la automoción en nuestro país no tiene precedentes y sus consecuencias para el empleo y la competitividad son impredecibles”. Con respecto a los datos registrados en el último mes, Morales señalaba que “pese a la leve mejoría del mercado en agosto, el bajísimo número de vehículos vendidos nos sigue hablando de un mercado raquítico que, impactado por un contexto desfavorable, no está siendo capaz de cambiar de dinámica para acercarse a unos registros más razonables”.
El alto coste de los combustibles, unido a la incertidumbre en torno a los nuevos escenarios planteados en el marco de las políticas de movilidad urbana sostenible y la incorporación de Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) a todas las poblaciones de 50.000 habitantes no más tarde de 2023, está provocando el recelo de la ciudadanía a la hora de consumir.
Crece el mercado de vehículos electrificados
Como consecuencia de la implantación de ese nuevo modelo de desarrollo sostenible, el sector del transporte deberá integrarse paulatinamente en un programa de descarbonización del país, en el que cada vez tienen menos cabida los coches de diésel y gasolina.
Según datos facilitados por la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE) y la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos (GANVAM), las matriculaciones de vehículos electrificados (100% eléctricos + híbridos enchufables) de todo tipo (turismos, dos ruedas, comerciales e industriales) subieron un 14,7% en agosto, hasta las 5.768 unidades, En lo que va de año, acumulan un total de 62.601 unidades, lo que supone un 30,8% más.
Transcurrida la primera mitad de este 2022, los datos indican que Castilla-La Mancha es la sexta comunidad autónoma en el ranking con más vehículos eléctricos e híbridos enchufables matriculados.
En la región, los eléctricos registran un resultado acumulado de 1.553 matriculaciones, lo que supone un 48,33% más que durante los primeros ocho meses de 2021, y los híbridos un total de 3.760 unidades, lo que se traduce en un 8,80% menos.
Si ponemos en comparación éstos con los datos que arrojan los turismos de gasolina y diésel, se evidencia que la automoción en Castilla-La Mancha, en sintonía con los ritmos que marcan tanto el mercado nacional como los europeos, está evolucionando hacia nuevos modos de reconversión industrial: los turismos de gasolina acumulan en estos ocho meses un total de 5.805 unidades, es decir, un 24,38% menos que el año pasado durante el mismo periodo, y los turismos de diésel acumulan un total de 2.833 unidades, lo que significa una caída del 39,88%.
No obstante, para poder consolidar el mercado de turismos electrificados y hacer una verdadera transición hacia ese nuevo modelo de desarrollo sostenible, deberán alcanzarse unos objetivos propuestos que, por ahora, no se estarían cumpliendo, y es que desde ANFAC señalaban este martes en una nota de prensa que “España se mantiene a la cola de Europa en lo que respecta al desarrollo de la electromovilidad, alejándose de los países de su entorno europeo”.
A pesar de que la infraestructura de recarga de acceso público ha aumentado en el segundo trimestre de 2022, desde la asociación consideran que se debería poner en marcha cuanto antes el desarrollo de dichas infraestructuras tanto en España como en el resto de países del entorno europeo.
Según José López-Tafall, director general de ANFAC, este escenario pone de manifiesto “la necesidad de acelerar el ritmo tanto en penetración de vehículo electrificado como de despliegue de puntos de recarga. A esta velocidad no llegamos a alcanzar los objetivos de descarbonización marcados por Europa y establecidos por el PNIEC que fijan para 2030 un parque de tres millones de turismos electrificados, mucho menos los nuevos objetivos acordados en junio”. Lopez-Tafall también sentenciabaque son necesarias las “propuestas que tratan de que el ciudadano vea la electromovilidad como algo accesible, fácil de usar y práctico, para que sea una opción masiva de compra y así acercarnos a los objetivos marcados”.
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