Las mujeres de AFAMMER han dado un paso al frente para plantar cara al covid-19, cogiendo telas y agujas para confeccionar centenares de mascarillas artesanales que serán repartidas a través de las diversas delegaciones para llegar al mayor número posible de personas.
La presidenta nacional de AFAMMER, Carmen Quintanilla, se ha felicitado por “esta iniciativa, que demuestra el alma, el corazón y la solidaridad de todas y cada una de nuestras mujeres, que en estos momentos de angustias quieren colaborar para que esta pesadilla acabe lo antes posible”.
La idea surgió a través de los grupos Whatsapp que las presidentas de ámbito nacional y provincial tienen como lugar de encuentro para compartir inquietudes, propuestas y otros aspectos relacionados con la actividad asociativa. Fue así, como se propuso llevar a cabo la confección de mascarillas artesanas, aprovechando las destrezas frente a la máquina de coser, que durante años se ha trasladado en forma de curso, del que se han beneficiado centenares de mujeres en toda España.
Sin dudarlo, las mujeres de AFAMMER han dado un paso al frente, para aportar su granito de arena, en coordinación con los cuerpos de seguridad del Estado, que serán los encargados de hacer llegar estos materiales a los diversos centros hospitalarios.
Quintanilla ha destacado que “entre todas nos hemos ido animando y nos hemos ido trasladando recomendaciones para que estas mascarillas sean lo mejor posible y realmente puedan tener un uso que palíe la escasez de medios con la que se están enfrentando nuestros sanitarios”.
Navarra, Jerez, Almería, Granada, Huelva, Burgos, Toledo, así como delegaciones de la provincia de Ciudad Real como Almodóvar del Campo, Pozuelo de Calatrava, Moral de Calatrava, Calzada de Calatrava, Fuente el Fresno o Almadén, se han sumado a esta iniciativa que a lo largo de estos días repartirá centenares de mascarillas, que no sólo contribuirán con la causa, sino que servirán para salvar vidas.
Junto a esta iniciativa, otras delegaciones, como AFAMMER La Solana, ha dado un paso más y ha cosido decenas de batas para atender en los geriátricos de la localidad, que sin duda serán recibidas con el mismo cariño, que nuestras mujeres han ofrecido en su confección.
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