La Junta destaca la contribución de la caza a la gestión sostenible de la fauna silvestre y al desarrollo rural

El Gobierno regional ha reiterado su compromiso para seguir trabajando "mano a mano con el sector cinegético" con el objetivo de que la caza se mantenga como una actividad esencial en Castilla-La Mancha, que no solo crea riqueza y dinamiza las áreas rurales, sino que también contribuye de manera fundamental a la gestión sostenible de la fauna silvestre.

Así lo ha destacado la consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, durante una reunión con la Federación de Caza de Castilla-La Mancha, en la que ha conocido a la nueva Junta directiva junto a su presidente, Agustín Rabadán. La consejera ha recordado que la región cuenta con 115.000 licencias y que la actividad cinegética representa el 1,7% del PIB regional, movilizando 600 millones de euros al año y creando 14.000 empleos.

Gómez ha puesto en valor la estrecha colaboración que mantienen con la Federación regional de caza, que ha permitido lograr hitos importantes, como la firma del primer Convenio que les faculta, supervisados por la Administración, a formar a través de cursos a nuevos cazadores y cazadoras, vigilantes de cotos y especialistas en control de depredadores, además de realizar diferentes actividades para promocionar la caza tradicional y la gestión cinegética en terrenos propiedad de la Junta de Comunidades.

La consejera también ha señalado que la Federación de Caza de Castilla-La Mancha es un miembro esencial del 'Pacto por la Caza' firmado por el presidente Emiliano García-Page, con el que se sigue avanzando para lograr que la caza sea reconocida como una actividad cinegética sostenible, socialmente reconocida y necesaria en el territorio.

Entre los objetivos recogidos en el Pacto que se van cumpliendo, Gómez ha citado la difusión de la actividad cinegética a través de ferias como Fercatur, la Feria de caza de Cuenca o la de Villanueva de la Fuente, así como las subvenciones públicas por importe de 580.000 euros para que el sector pueda llevar a cabo actuaciones de mejora de hábitats de especies de caza menor, además de realizar un importante esfuerzo de recopilación de datos en campo de las especies que la Unión Europea está estudiando como posible "estado inseguro de sus poblaciones", entre las que se encuentra la tórtola europea.

Otras actuaciones destacadas incluidas en los compromisos del Pacto por la Caza son el 'Plan de Gestión de la perdiz roja' y la participación activa en proyectos europeos como el 'LIFE Iberconejo', con el que se persigue mejorar el estatus de la especie en la península ibérica, tanto para reducir sus sobrepoblaciones como para fomentar su presencia en las zonas donde se encuentra reducida.