García-Navas acusa al PP y Vox de "marear la perdiz" ante los aranceles de Trump que amenazan el vino castellanomanchego

El secretario de Formación del PSOE de Castilla-La Mancha, Sergio García-Navas, ha acusado este viernes al PP y Vox de eludir su responsabilidad ante la amenaza de aranceles del 200% a productos como el vino impuestos por Donald Trump, que afectarían a más de 1.000 empresas y miles de familias de la región. Durante una rueda de prensa en Toledo, ha destacado que el presidente Emiliano García-Page es «el único que defiende abiertamente los intereses del campo» frente a la «pasividad» de la oposición.

García-Navas ha criticado la actitud del PP en el pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha, donde, según él, «marearon la perdiz mezclando el debate con otros temas para no molestar a sus socios de Vox». Sobre la formación ultraderechista, ha denunciado que su estrategia fue pedir «guardar silencio para que EE.UU no note que existimos», algo que ha tildado de «complacencia peligrosa».

Ruptura PP-Vox: «Ojalá rompieran por motivos de fondo, no por rifirrafes»

El dirigente socialista ha cuestionado la reciente ruptura de gobiernos locales entre PP y Vox en municipios como Carranque (Toledo), motivada por «disputas internas» y no por diferencias políticas sustanciales. «Ojalá el PP mostrara esa firmeza para romper acuerdos en todas las diputaciones y ayuntamientos por su tibieza ante los aranceles, no solo por peleas internas», ha afirmado.

García-Navas ha subrayado que el sector agroalimentario —que representa el 18% del PIB regional— necesita una defensa «activa» en la UE para evitar un «impacto devastador» en localidades donde es el principal sustento económico. «Pedimos a Bruselas que proteja a nuestras familias y empresas, no solo al vino, sino a toda la cadena productiva», ha concluido.

Una región en la diana de Trump

La posible imposición de aranceles del 200% a bebidas como el vino —producto clave en Castilla-La Mancha, que concentra el 50% de la producción nacional— ha encendido las alarmas en un sector que ya enfrenta desafíos como la sequía y la inflación. El PSOE ha insistido en que la solución requiere «unidad europea» y no «silencios cómplices o distracciones», en clara alusión a sus rivales políticos.