En el escenario de desafíos medioambientales en el que se encuentra la sociedad y ante la necesidad de hacerles frente para mejorar la vida tanto de las personas como del entorno, Cruz Roja tiene muy claro su compromiso. Y ese compromiso, concretamente en el ámbito del empleo, pasa por el fomento de todas las formaciones que tienen que ver con la sostenibilidad, y, en especial, con las energías renovables.
Muestra de ello es cómo en la provincia de Ciudad Real Cruz Roja ha puesto en marcha en lo que va de año 5 acciones formativas relacionadas con el sector de las placas solares fotovoltaicas en Alcázar de San Juan, Ciudad Real, Manzanares, Puertollano y Tomelloso en las que han participado un total de 81 personas que en el momento de comenzar el curso estaban desempleadas.
Según explica el coordinador del área de Empleo de Cruz Roja en Ciudad Real, Germán Barchino, hay dos lógicas que se aplican en las decisiones que se adoptan dentro del Plan de Empleo de Cruz Roja en esta materia. La primera es de valores “porque Cruz Roja es una organización comprometida con la sostenibilidad, porque a medio y largo plazo es humanidad y es prevención de sufrimiento a las personas, especialmente a las más desfavorecidas”. Y es que estamos viendo cómo, por ejemplo, las temperaturas anómalas de junio han sido especialmente duras con quienes no tienen recursos para poner el aire acondicionado.
La segunda lógica a la que se refiere Barchino responde a la propia misión del Plan de Empleo de Cruz Roja, que en este 2022 cumple 20 años, que es responder a las demandas del mercado de trabajo. “Hay ofertas de empleo, cada vez más en nuestro territorio, relacionadas con las energías renovables, cuya capacitación y preparación están al alcance de los recursos de Cruz Roja y hay otras ocupaciones tradicionales, como la agricultura, que antes o después se verá abocada a criterios de racionalización de recursos hídricos, limitación de agroquímicos o uso de tecnologías, que emplea a muchas personas, y que cuanto antes las preparemos, antes serán competentes en escenarios laborales futuros”, argumenta.
Así, la transformación de los itinerarios de Cruz Roja en empleos reales avanza a buen ritmo. En estos momentos son las energías renovables las que tiran con fuerza del empleo verde en la comarca de La Mancha, aunque lo hacen de manera más lenta en la comarca de Puertollano y Valle de Alcudia, donde la apuesta por el sector ha sido fuerte, pero en la que los problemas ambientales están retrasando la puesta en marcha de varios proyectos de gran envergadura. Tanto en Puertollano como en Ciudad Real, Cruz Roja ha desarrollado recientemente los cursos de Operaciones para el montaje de instalaciones solares fotovoltaicas y actualmente se está llevando a cabo en la ciudad minera una segunda edición.
Otro de los cursos que se han organizado en la provincia sobre montaje y mantenimiento mecánico en plantas solares fotovoltaicas, se ha impartido en Manzanares, con la asistencia de 16 personas, 8 hombres y 8 mujeres. Con 90 horas lectivas, ha estado compuesto por tres bloques: uno de operaciones básicas, ensamblado y procesos de unión, otro de prevención de riesgos laborales en estructuras metálicas y un tercer bloque de prevención de riesgos laborales en montaje y mantenimiento eléctrico.
Antes de terminar la acción formativa, se produjo una demanda de mano de obra por lo que desde Cruz Roja se procedió al envío de candidaturas y, durante la siguiente semana, fueron seleccionados cinco alumnos por parte de la empresa TCI GECOMP Energía. Uno de esos alumnos es Antonio José López de Mozos, de 40 años, que en el momento en el que comenzó el curso se encontraba en situación de desempleo. Asegura que la experiencia formativa con Cruz Roja ha sido excelente, tanto por la profesionalidad del formador como por los contenidos del curso y se muestra entusiasmado con su inminente entrada al mercado de trabajo: “Haber encontrado empleo tan rápido demuestra que esto es el futuro. Es un sector que crece, hay demanda de empleo y Cruz Roja está respondiendo ofreciendo cursos como este que, en mi caso, me ha ayudado a aprender y a conseguir un puesto de trabajo”.
Luis Miguel Fernández, técnico de Empleo de Cruz Roja en Manzanares, asegura que desde la organización se está aprovechando esta oportunidad del auge en el montaje de placas solares y que, fruto de ello, tras esta exitosa acción formativa, se va a poner en marcha otra más durante este verano: “Vamos a capacitar a más personas para que tengan a su alcance la posibilidad de obtener un empleo y con ello puedan ganar en independencia y autonomía económica”, explica.
Con alumnado tanto de Alcázar de San Juan como de Tomelloso, se está desarrollando actualmente en Cruz Roja Alcázar de San Juan el curso Cualificación básica para el montaje y mantenimiento de placas solares, dirigido a jóvenes inscritos en el sistema de garantía juvenil con edades comprendidas entre los 16 y los 30 años. Según explica la técnico de Empleo de Cruz Roja en la localidad, Alba Torrijos, “está siendo un éxito puesto que muchos de ellos ya están en procesos de selección y eso que aún no ha finalizado el curso”. Cristian Cepeda, uno de los alumnos de este curso, tiene 25 años, estudió un ciclo formativo de grado medio de electricidad y tiene claro que es necesario formarse en energías renovables: “Las situaciones que estamos viviendo ponen de manifiesto que este es el camino que hay que seguir, porque no podemos estar dependiendo energéticamente de otros países, por citar solo una de las razones”.
Jesús Quintanar, docentes de esta acción formativa, explica lo importante que es la práctica en este tipo de formaciones, pues el alumnado puede tocar y ver las instalaciones fotovoltaicas; montar y desmontar placas; hacer conexionados de placas junto con el inversor, etc. “Estos cursos tienen la capacidad de abastecer la demanda de profesionales cualificados que tiene el sector. La apuesta por formar a estas personas está en el camino correcto”, asegura.
Agregar comentario