Desde el Ilustre Colegio de Abogados de Ciudad Real, expresamos nuestro profundo pesar por el fallecimiento, ayer 19 de mayo, del Excmo. Sr. D. Federico Castejón Sánchez, Decano emérito de nuestro Colegio.
Ante esta triste noticia, no podemos sino trasladar nuestras más sinceras condolencias y todo nuestro afecto y ánimo a sus familiares y allegados, especialmente a su mujer e hijos, y manifestar el vacío que deja su pérdida en el colectivo, tanto a nivel profesional como personal.
Nuestro querido Decano ha sido destacado miembro de la Abogacía ciudadrealeña, castellanomanchega y española.
Ha sido colegiado del Ilustre Colegio de Ciudad Real desde el 15 de octubre de 1959, con el número 510; igualmente, ha pertenecido a los Ilustres Colegios de Madrid, Albacete, Córdoba y Jaén.
También ha sido un reputado abogado durante más de 50 años, en los que fundó su despacho e hizo gala de los valores que él mismo consideraba que se debían tener para ser un buen abogado: vocación, desinterés propio, libertad e independencia.
En su faceta institucional ha ocupado diferentes cargos de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Ciudad Real, habiendo sido tesorero, bibliotecario, secretario y diputado 1.º, hasta ser elegido Decano entre los años 1977 y 1992, en una época donde, entre otros cosas, se tuvo que hacer frente a la adquisición y financiación de la antigua sede —sita en el Pasaje de la Merced—, y se firmó el primer Convenio con la Universidad, de lo que luego ha sido origen de la Escuela de Práctica Jurídica. Igualmente, se refundó la Revista Foro Manchego en su segunda época.
Ha sido primer presidente del Consejo Regional de la Abogacía, miembro de la Comisión Permanente del Consejo General de la Abogacía y Consejero de la misma. Ostenta la Cruz de 1.ª clase de San Raimundo de Peñafort, la Medalla de Honor del Ilustre Colegio de Abogados de Ciudad Real y la Medalla de Honor del Consejo Regional de la Abogacía.
Despedimos con gran pesar a un referente de la Abogacía institucional que dedicó gran parte de su carrera a representar a la profesión, que nos consta que amaba, y a luchar por los intereses de sus compañeros.
D.E.P.
Agregar comentario