Roberto Aguado, un hombre de 47 años natural de Badajoz y residente en Puertollano, separado y padre dos hijos, ha iniciado hoy una huelga de hambre para pedir un levantamiento de embargo judicial, del que "es víctima" a consecuencia de las denuncias de su exmujer, asevera
Inicia una huelga de hambre para pedir el levantamiento de embargo judicialObjetivo CLM. EFE Aguado ha decidido iniciar una acampada permanente en la Concha de la música de Puertollano en "huelga de hambre indefinida" tras verse inmerso "en una batalla legal" con su exmujer, que le ha denunciado por incumplimiento del régimen de visitas y quien le reclama la manutención atrasada de sus hijos, tal y como ha explicado a Efe el afectado. "Yo vivía en Badajoz con mi mujer y mis dos hijos, -ha dicho Aguado- pero en el momento de la sentencia de divorcio, en mayo del 2007 ella se vino a Puertollano, su ciudad natal". Después de dos meses de idas y venidas de Badajoz a Puertollano, Aguado decidió dejar su trabajo y mudarse a Puertollano para estar cerca de sus hijos, según su versión. En ese momento, inició "una pesadilla que no termina" que le está generando muchos problemas de salud de hipertensión y ansiedad, ha afirmado. "Los cinco primeros años de divorciados, todo va estupendamente, mi exmujer ni siquiera me pide manutención porque yo me encargo de todos los gastos de mis hijos, incluso pasan largas temporadas conmigo porque ella trabaja en Solaria en turnos de noche", expone Aguado. Sin embargo, lamenta que cuando él se quedó sin trabajo, tuvo que volverse a Badajoz, lo que le impidió cumplir con el régimen de visitas establecido. Esta circunstancia le llevó a su exmujer a denunciar a Roberto después de seis años divorciado y además le reclaman la manutención de sus hijos, actualmente de 16 y 10 años, en todo ese tiempo, según la versión del hombre. Según continúa Aguado, volvió a Puertollano para hacerse cargo de sus hijos, con la ayuda de familiares y amigos, pero su exmujer le impide verlos, a pesar de existir "una cláusula en el convenio regulador del documento de divorcio" que, según dice el afectado, le permite "ver a los niños cuantas veces quiera". En ese momento, el afectado decidió denunciar a su exmujer por no dejarle ver a sus hijos, pero lamenta: "el juez le dio la razón a ella que se presenta diciendo desde el minuto 1 que yo abandoné a mis hijos, lo cual no es cierto". Roberto Aguado, se siente "desesperado" porque está en un "bucle" al que no le ve la salida, ya que cuando empieza a "trabajar en una empresa automáticamente, llega un embargo del cien por cien del sueldo", lo que le impide mantener a sus hijos y a él mismo. Se siente "desprotegido" ante la justicia y explica que ha decidido ponerse en huelga de hambre para "reclamar a la justicia" que le deje tener a sus hijos, "darles de comer y atender sus necesidades y sensibilizar a la población". |
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