El pabellón Puerta de Santa María de Ciudad Real ha sido el escenario de la Supercopa de España de baloncesto en silla de ruedas, celebrada por primera vez en la ciudad y que ha reunido durante todo el fin de semana a los mejores equipos nacionales.
La gran final, disputada entre el Amiab Albacete, campeón de Liga, y el Ilunion, campeón de la última Copa del Rey, concluyó con una ajustada victoria del equipo madrileño, que se alzó como campeón de la Supercopa tras un partido decidido en el último segundo.
El alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, y la concejal de Educación, María José Escobedo, asistieron a la final y a la entrega de premios. Escobedo destacó el alto nivel del torneo y el ejemplo de superación mostrado por los jugadores: “Es un honor para Ciudad Real acoger esta Supercopa y disfrutar del nivel y afán de superación de los equipos participantes”, afirmó.
Por su parte, el presidente del Comité Paralímpico Internacional, Andrew Parsons, subrayó la importancia del evento: “En términos de clubes, este es el partido de máximo nivel de Europa y quizá del mundo”, dijo Parsons, quien destacó la entrega de los jugadores hasta el último segundo.
La FEDDF (Federación Española de Deportes de Personas con Discapacidad Física) agradeció el apoyo del Ayuntamiento de Ciudad Real en la organización del torneo y entregó una placa conmemorativa que fue recogida por el alcalde.
Desde el sábado, los cuatro equipos participantes —Amiab Albacete, Ilunion, Bidaideak Bilbao y UCAM Murcia— compitieron en partidos eliminatorios hasta llegar a la emocionante final del domingo. Con esta victoria, Ilunion suma un nuevo título a su palmarés en una edición de la Supercopa de España marcada por la calidad deportiva y el esfuerzo de los jugadores.
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