Unas 300 personas han asistido este miércoles al Teatro Municipal Quijano de Ciudad Real para participar en la décimo séptima edición del ciclo "Cine por la Paz", organizado por la ONG Movimiento por la Paz. La proyección de la película islandesa "La mujer de la montaña" ha servido como punto de partida para reflexionar sobre el activismo ambiental y la solidaridad, en el marco de la II Semana de la Inclusión y la Solidaridad organizada por la concejalía de Servicios Sociales del ayuntamiento.
El delegado de Movimiento por la Paz en Ciudad Real, Manuel Lorenzo, ha destacado que la cinta, aunque rodada en Islandia, presenta analogías con la realidad local. "Ella quiere luchar contra la contaminación que genera la industria del aluminio en su país, y al mismo tiempo se generan situaciones que también vemos en otros ámbitos de persecución a quienes se manifiestan", ha explicado. Lorenzo ha añadido que "no es una cuestión ajena en nuestra tierra", citando como ejemplos "las macrogranjas o la minería de tierras raras", e ha invitado a "buscar un equilibrio entre el desarrollo y el respeto al medio ambiente y a la vida de las personas".
La concejala de Servicios Sociales, Aurora Galisteo, ha reconocido la labor de Movimiento por la Paz, "a la que avalan muchos años de trabajo a sus espaldas". Galisteo ha subrayado que "nadie más que ellos saben lo difícil que es a veces hablar de inclusión y solidaridad, sobre todo cuando nos referimos a personas migrantes", y ha destacado que la organización es "un referente en nuestra ciudad" frente a quienes "a veces alzan la voz criticando".
La película narra la historia de Halla, una profesora de canto de cincuenta años que lleva una vida apacible en Reikiavik pero que, en secreto, lidera una cruzada contra la industria local del aluminio. Su determinación por sabotear infraestructuras eléctricas para frenar la expansión industrial se ve complicada cuando recibe la noticia de que su solicitud para adoptar a una niña ucraniana ha sido aprobada, lo que la enfrenta a una difícil decisión entre su activismo y su deseo de ser madre.
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