Castilla-La Mancha supera los cinco millones de pernoctaciones regladas por primera vez en los once primeros meses del año

Los resultados de la Encuesta de Ocupación de Alojamientos de Turismo Rural (EOTR) del Instituto Nacional de Estadística (INE) publicada esta mañana para el mes de noviembre de 2022, arrojan resultados muy positivos para Castilla-La Mancha. La región presenta un aumento del 20,1 por ciento en pernoctaciones rurales respecto al mismo mes del año anterior, siendo el destino que experimenta un mayor dinamismo. Además, el 10,8 por ciento sobre el total de viajeros que escogieron alojamiento rural en noviembre es la mayor cuota de mercado jamás alcanzada por Castilla-La Mancha. En cuanto a los viajeros alojados, la región ocupa, en noviembre, el segundo lugar entre las comunidades autónomas, con un aumento del 19,3 por ciento.

Por otra parte, los datos del acumulado enero-noviembre de 2022, también arrojan un récord absoluto tanto en viajeros como en pernoctaciones rurales, al igual que el máximo registro histórico en volumen de viajeros alojados y pernoctaciones en el conjunto del segmento de alojamiento extrahotelero (rural + apartamentos + campings). Castilla-La Mancha se sitúa como el destino que más crece en viajeros alojados hasta noviembre y el tercero en pernoctaciones rurales hasta el mismo mes. Las 745.000 pernoctaciones rurales registradas hasta noviembre superan con creces el récord anterior de 700.000 noches alcanzado durante los doce meses de 2018, por lo que, aunque los datos de diciembre sean aún desconocidos, se puede afirmar que Castilla-La Mancha ha conseguido un récord absoluto de demanda en alojamiento rural para 2022.

Además, si se incorporan los datos de la Encuesta de Ocupación Hotelera del INE de pernoctaciones en hoteles, se supera el umbral de los cinco millones de pernoctaciones regladas, algo que solo había sucedido en 2018 y 2019. Esta es la primera vez que se alcanza este nivel en los once primeros meses del año, sin contar los resultados de diciembre. Lo que sí es seguro es que, el grado de recuperación de la demanda, en el conjunto de alojamiento reglado de Castilla-La Mancha, es de un 103,6 por ciento, frente al umbral de actividad turística de los once primeros meses de 2019, año previo a la pandemia, mucho más alto que el 95,1 por ciento que registra el conjunto del sector turístico español. Por quinto mes consecutivo, superando los efectos adversos de la crisis sanitaria en la demanda, se alcanza un récord absoluto de pernoctaciones.