Castilla-La Mancha prevé una campaña de vendimia superior a la pasada, con uva de gran calidad y buenos precios del vino

El Gobierno de Castilla-La Mancha prevé que la campaña de vendimia sea superior a la del año pasado, con uva de muy buena calidad y con unas existencias de final de campaña que son las más bajas desde 2013. Así lo ha explicado el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, antes de acompañar a los socios agricultores de la Cooperativa Virgen de las Viñas en su comida de campaña, con motivo de la vendimia.

Respecto a la producción que se espera, el consejero ha explicado que la previsión de campaña es que la cosecha sea superior a la del año pasado, aunque seguirá estando por debajo de la media de la última década, que se sitúa en los 25 millones de hectólitros. A ello hay que sumar que las existencias finales de la campaña a 31 de julio indican que hay 6,7 millones de hectólitros de vino, un 32% menos que el año pasado en la misma fecha, y si se suma vino y mosto, hay 7,4 millones de hectólitros, un 36,5% menos, dándose la circunstancia de que no se registraban unas cifras similares desde el año 2013.

Martínez Lizán ha destacado que tan sólo queda medio millón de hectólitros de vino envasado, "algo que no había ocurrido nunca antes". Por ello, la apuesta del Gobierno del presidente García-Page es potenciar el vino embotellado cada vez más, ya que la calidad de los vinos de la región así lo exige, deja mayor margen a los agricultores y las 24 figuras de calidad son muestra de la calidad de los vinos castellanomanchegos.

El consejero ha añadido que a estos buenos datos hay que sumar que Castilla-La Mancha facturó más que nunca en exportación de vino en el primer semestre de 2024, con 386 millones de euros, superando el récord de 2018, "unas cifras nunca antes conocidas, récord de ventas". Esto es posible gracias al esfuerzo de los viticultores de la región por adaptarse a los gustos de los consumidores, reestructurando variedades en función de las tendencias del mercado. Desde 2018, se han reestructurado 47.800 hectáreas de viñedo en Castilla-La Mancha, para lo que el Ejecutivo autonómico ha destinado 178,7 millones de euros.

En cuanto al transcurso de la campaña, Martínez Lizán ha dejado claro que, como es habitual, desde la Consejería se van a realizar controles durante la campaña de vendimia, de manera complementaria a la AICA, "para velar por el cumplimiento de la cadena alimentaria, es decir, que haya contratos, que los precios superen los costes de producción y que se paga en el plazo establecido".