Castilla-La Mancha defenderá un modelo de financiación autonómica justo y equitativo que tenga en cuenta la realidad de los territorios

El Gobierno de Castilla-La Mancha reafirma su postura de defender una financiación autonómica que garantice la justicia y la equidad, teniendo en cuenta la realidad de los territorios. Así lo ha manifestado el vicepresidente segundo, José Manuel Caballero, desde Viso del Marqués, ante la próxima reunión prevista entre el presidente de España, Pedro Sánchez, y el jefe del Ejecutivo autonómico, Emiliano García-Page.

Caballero ha asegurado que el presidente García-Page "va a defender con firmeza una financiación autonómica más justa que nos permita recuperar los fondos que no hemos tenido estos años", señalando que la región ha estado infrafinanciada "por un modelo injusto". El Gobierno de Castilla-La Mancha pondrá todos los medios y recursos de los que dispone para asegurar que no se impone un modelo de financiación que no esté basado en los principios de justicia y equidad y que no tenga en cuenta la realidad de las regiones.

El vicepresidente segundo ha subrayado que "cualquier modelo de financiación autonómica debe tener en cuenta las necesidades de los territorios para garantizar la prestación de servicios y las infraestructuras". Desde el Gobierno regional, se busca que se trate a las comunidades autónomas en función de sus necesidades y no de su origen estatutario, garantizando la equidad e igualdad de las personas con independencia del lugar en el que residan. Caballero ha recordado que "los impuestos los pagan los ciudadanos, no los territorios".

"Tiene que quedar muy claro que desde Castilla-La Mancha no vamos a consentir en ningún caso un modelo de financiación que no sea justo porque la Constitución garantiza que las comunidades tienen que contar con los recursos necesarios para la prestación de los servicios", ha remarcado el vicepresidente segundo. El Gobierno regional aboga por que todas las comunidades autónomas se sienten en la misma mesa para alcanzar un modelo basado en la justicia y la equidad.

Caballero ha indicado que el modelo que defiende Castilla-La Mancha es un modelo de Estado, que no solo sea positivo para la región, sino que garantice una prestación justa de los servicios en todos los territorios. "No queremos que aquí se presten servicios mejor que en otras comunidades autónomas, queremos que se garantice que se puedan prestar igual en todos territorios atendiendo a la realidad de cada uno con indicadores como la dispersión de la población o el envejecimiento", ha concluido.