Carrión de Calatrava ha sido escenario de una concentración pacífica en la plaza principal de la localidad, donde vecinos, asociaciones locales y miembros del Ayuntamiento manifestaron su rechazo al proyecto de una planta de biometano. La movilización incluyó la recogida de cientos de firmas, con las que solicitan la paralización del proyecto por las preocupaciones sobre sus efectos ambientales y sociales.
A la convocatoria asistió también el vicepresidente del gobierno regional, José Manuel Caballero, quien mantuvo una reunión informal con los ciudadanos para escuchar sus inquietudes. Entre las preocupaciones expresadas destacan las emisiones de gases contaminantes, la generación de olores desagradables, el riesgo de contaminación del agua y el suelo, y la proximidad de la planta tanto a Carrión de Calatrava como a Torralba de Calatrava.
Impactos ambientales bajo análisis
Durante la concentración, se distribuyeron folletos informativos que advertían sobre los posibles riesgos asociados al proyecto, como la emisión de malos olores, la presencia de metales pesados y fitotóxicos, la posible sobreexplotación del acuífero 23, y el impacto de un constante tránsito de camiones pesados. Además, se cuestionaron los beneficios reales en términos de descarbonización, señalando que podría tratarse de una falsa sostenibilidad.
Los vecinos insistieron en que este tipo de desarrollo no es adecuado para la comunidad ni para el entorno natural. "Queremos un proyecto que respete nuestra calidad de vida y nuestro entorno. No podemos aceptar algo que podría ser tan perjudicial para nuestras poblaciones y el medioambiente", afirmaron varios asistentes.
Respuesta del Ayuntamiento y próximas acciones
El alcalde de Carrión de Calatrava, Dionisio Moreno, manifestó su disposición a escuchar las preocupaciones de los vecinos, asegurando que la aprobación vecinal será clave para valorar la viabilidad del proyecto. Asimismo, expresó su compromiso de estudiar alternativas y buscar soluciones que sean aceptables para la comunidad.
La jornada concluyó con una recogida de firmas, mientras los organizadores anunciaron próximas actividades para mantener viva la oposición, como un taller de confección de pancartas y una ruta de senderismo de hermanamiento entre Carrión de Calatrava y Torralba de Calatrava, las dos localidades afectadas por este proyecto.
Con esta movilización, la comunidad pretende seguir alzando la voz en defensa de su entorno y exigir proyectos que se alineen con un desarrollo más sostenible y respetuoso con sus necesidades.
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