La presidenta nacional de AFAMMER y Parlamentaria Honoraria en el Consejo de Europa, ha asistido a las sesiones del Pleno del mes de abril celebrado en Estrasburgo para conocer de primera mano las iniciativas en materia de igualdad de oportunidades, prestando especial atención a las que se desarrollan en el medio rural.
Carmen Quintanilla asiste al Consejo de Europa para conocer las acciones y avances en materia de igualdadObjetivo CLM Carmen Quintanilla en su calidad de Parlamentaria honoraria en el Consejo de Europa, tiene acceso a las sesiones del Pleno del Hemiciclo celebrado en Estrasburgo donde cuenta con voz, pero no voto. Por ello, ha querido conocer de primera mano los avances y retos en materia de igualdad de oportunidades. La también presidenta nacional de AFAMMER (Asociación de Familias y Mujeres del Medio Rural), ha asistido a la Comisión de Igualdad donde ha comparecido Ana Peláez, presidenta de la de la ONU para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) y vicepresidenta de la Fundación CERMI Mujeres, para analizar la realidad de las mujeres con discapacidad a nivel internacional y expresar el compromiso de Naciones Unidas con las mujeres con discapacidad. Quintanilla también ha estado presente en la comparecencia de la ministra de exteriores de Islandia, con motivo de la cumbre de jefes de estado del Consejo de Europa que desde hace 18 años no se había celebrado. “En el medio rural la discapacidad adquiere un nuevo sentido, pues, las barreras físicas y el acceso a los servicios sanitarios, educativos y sociales es más complicado para las personas con discapacidad que residen en este entorno”, ha expresado. Así mismo, ha matizado que aunque no existe una fórmula mágica o un diseño infalible, fomentar el empoderamiento de las mujeres rurales con discapacidad mejoraría en gran parte su situación. ”Un empoderamiento a nivel individual, pero también en el plano comunitario o colectivo, que esté acompañada por políticas públicas en materia de igualdad de género, pues si miramos al tejido empresarial en el medio rural europeo observamos que es casi inexistente, de pequeño tamaño y poco sensibilizado hacia la contratación de personas con discapacidad”, ha destacado. Y añade que a esta dificultad se suman las barreras para la financiación del emprendimiento. “Europa tiene mucho camino que recorrer para conseguir la igualdad real de oportunidades de mujeres y hombres, y debemos prestar especial atención a las personas más vulnerables para que puedan vivir con una calidad de vida digna”, ha concluido. |
Agregar comentario