Sus 120.000 metros cuadrados, lo convierten no solo en “El Parque” por antonomasia de la capital, sino además en el parque urbano más grande de Castilla La Mancha.
Situados en pleno centro de Albacete, nos adentramos en esta inmensa zona verde, recorriéndola a través de sus dos grandes paseos arbolados que nos conducirán a una gran diversidad no solo de flora y fauna sino también de edificios, monumentos o incluso estanques ubicados dentro del mismo.
Respecto a la flora del lugar, destacaremos los grandes y altos pinos y los plátanos que bordean los paseos principales.
De la fauna distinguiremos la variedad de aves, ya que no solo recoge las especies propias de otros parques urbanos, como palomas, tórtolas, gorriones y torcaces, sino que también encontraremos agateadores, mirlos, verdecillos e incluso petirrojos. Cabe destacar también las ardillas rojas y los patos del estanque.
Empezando con nuestro paseo nos encontramos con un pequeño monumento de un busto de Saturnino López, quien dono a la ciudad las aguas de un manantial de su propiedad. Se puede apreciar también otro busto de Miguel de Cervantes (1968), continuando por el camino central, llegamos a una explanada en la que se ubica el Colegio de San Fernando. Seguimos hacia la Cruz de los Caídos, monumento posterior a 1940. Cerca de él está el Museo Provincial y más adelante nos encontraremos con un estanque lleno de patos, desde el cual podemos ver otro busto, esta vez, del poeta alicantino Azorín, al fondo de toda esta escena se encuentra un parque infantil.
No necesitamos realizar más que un pequeño trayecto como este, para darnos cuenta que este lugar es mucho más que un parque corriente, dando lugar a diversas actividades culturales y artísticas y siendo un referente punto de encuentro de la ciudad.
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